Su popularidad y talento son innegables y por fortuna, esta seductora actriz aún tiene mucho camino por recorrer, historias por contar desde la gran pantalla, sueños por cumplir, premios por atesorar, y valiosas acciones solidarias por concretar. Vale la pena, por lo tanto, conocer a fondo la trayectoria prestigiosa y el costado más humano de esta estrella.

Darle vida a toda clase de personajes para enriquecer puestas tanto televisivas como cinematográficas, es el punto fuerte de Penélope Cruz, esta bella mujer que nació el 28 de abril de 1974 en el municipio español de Alcobendas en Madrid, quien se animó también a lo largo de su carrera a desarrollar otras actividades muy dispares. Ha desfilado llevando su arte por el mundo, incursionó como editora de revistas, aceptó probar suerte como diseñadora de joyas, dio a conocer públicamente sus habilidades para el canto, participó en videoclips y ha puesto su voz al servicio de proyectos como la comedia de Disney “G-Force” y el documental de Netflix “Nuestro planeta”. Dijo “ador0 mi profesión y agradezco mantenerme activa laboralmente desde hace tanto tiempo, aunque ahora que soy madre organizo y adapt0 mis actividades en función de Leo y Luna, mis dos amores, cuya crianza consider0 una prioridad”.

Penélope, su nombre está inspirado

en Joan Manuel Serrat

Penélope es hija de la pareja conformada por María de la Encarnación Sánchez y Eduardo Cruz, ella debe su nombre al fanatismo de sus padres por Joan Manuel Serrat, cantautor que tiene en su haber una canción emblemática titulada así. Sus hermanos también se dedican a cuestiones artísticas: Mónica es modelo, actriz y bailarina, mientras que Eduardo es compositor y cantante. Su familia, tanto la de origen como la que conformó con el reconocido actor Javier Bardem y los dos hijos de ambos, es su motor y cable a tierra.

Penélope recuerda con calidez a su padre y le rinde homenaje con frecuencia a través de Instagram, red social donde acumula más de cuatro millones de seguidores. Su madre, cada vez que puede, la acompaña a ceremonias y presentaciones. A ella, que la apoya y escolta de manera incondicional, y a su suegra Pilar Bardem, les dedicó el reconocimiento que obtuvo como “Mejor Actriz de Producción Internacional”, en la ceremonia del año 2019 de la Unión de Actores y Actrices.

Cuando la cronista de la revista Elle le preguntó, en su opinión, dónde radica la esencia de lo femenino, ya que siempre ha interpretado a mujeres trascendentes dijo: “en la fortaleza de las mujeres de mi familia, mi madre, mis abuelas, que es lo que me ha inspirado toda mi vida. Las he visto luchar y respetarse a sí mismas”. Como se dedica a esta actividad desde los quince años, cree firmemente que eso le ha dado el entrenamiento necesario para decir: “no me creo ni lo bueno ni lo malo que dicen de mí”.

Sin lugar a dudas, solo una mujer muy segura de sí misma y de fuertes convicciones, nos puede dar este testimonio.

Una actriz de actividad

incesante al estilo Almodóvar

“Átame”, la obra que en 1990 filmó Pedro Almodóvar junto a ella, marcó el destino de esta maravillosa española. Este filme despertó en ella un profundo deseo de ser actriz y llegar a trabajar bajo las órdenes del afamado cineasta. En pos de ese sueño que terminó haciendo realidad, asistió en su juventud a clases de ballet, aprendió a bailar jazz, se instruyó en materia de interpretación y se presentó en todas las audiciones que pudo hasta conseguir la visibilidad que buscaba para tener oportunidades artísticas.

Almodóvar la dirigió por primera vez en “Carne trémula”: con el tiempo también se unirían laboralmente en “Todo sobre mi madre”, “Volver”, “Los abrazos rotos”, “Los amantes pasajeros” y “Dolor y gloria”. Nominaciones y premios como el Goya y el de los festivales de Hollywood y Cannes, son también recompensas que le dejaron estos desafíos profesionales, gracias a los cuales compartió elenco con figuras como Cecilia Roth, Carmen Maura y Antonio Banderas, por ejemplo.

La chica Almodóvar oriunda de Alcobendas que logró conquistar Hollywood también trabajó con cineastas como Alejandro Amenábar, su director en “Abre los ojos”; Fernando Trueba, al frente de “Belle Époque”, “La niña de tus ojos” y “La reina de España”; Woody Allen, quien escribió y dirigió “Vicky Cristina Barcelona” y “De Roma con amor”; y Rob Marshall, al cual tuvo como guía en “Nine” y en “Piratas del Caribe 4: navegando en aguas misteriosas”. Tampoco se puede dejar de mencionar que integró los repartos de “Jamón, jamón” dirigida por Bigas Luna, “El efecto mariposa” de la mano de Fernando Colomo, “La Celestina” con dirección de Gerardo Vera y de “El amor perjudica seriamente la salud”, producción española que tuvo a Manuel Gómez Pereira orquestando la obra, por repasar otros filmes que ayudaron a crecer a esta artista que, en 2014, siguió las indicaciones de Julio Medem al rodar “Ma Ma”.

En una entrevista con el diario “El país” de España, aseguró: “En mi carrera he tenido la suerte de encontrarme con varios papeles complejos y muchos de ellos con el director Pedro Almodóvar” y agregó: “no hay dos personajes iguales, así que es un pozo sin fondo de búsqueda y aprendizaje, y es lo que más me gusta realizar”.

 Madre, esposa, compañera…

La multipremiada actriz que, fruto del amor con Javier Bardem, tuvo dos hijos preciosos, aspira a que ellos tengan una infancia lo más normal posible. Desde que llegaron al mundo, los pequeños son su prioridad y asegura que “la maternidad es mi mayor fuente de felicidad”. Leo nació el 22 de enero de 2011 en Los Ángeles y su hermana Luna, el 22 de julio de 2013 en Madrid. Si bien la pareja intenta preservar la intimidad familiar porque los menores no eligieron la exposición pública, no esconde a sus herederos de los flashes ni evita referencias hacia ellos durante las entrevistas.

Respecto a su educación y hábitos, la artista se ha expresado a favor de una infancia en contacto con libros, juegos al aire libre, disfrute de la naturaleza y creatividad infantil, sin estímulos tecnológicos. “Considero que Leo y Luna ya van a tener tiempo al crecer, para adquirir conocimientos y dominio de tablets, teléfonos celulares, y otros dispositivos modernos”.

El cuerpo es su templo

La bebida desarrollada por la industria enológica está muy presente en la vida de Penélope Cruz, una bella mujer que cuida su figura, pero se permite con frecuencia placeres como una copa de vino tinto y exquisiteces de chocolate para deleitarse. Hace algunas temporadas, al igual que colegas como Charlize Theron, Pierce Brosnan y George Clooney, la actriz apadrinó a “Whatever It Takes” de Bodegas Vicente Gandia, una colección con fines solidarios que se caracterizó por la donación del dinero obtenido por las ventas de esas botellas a la Casa Caridad situada en Valencia. Por otra parte, es simpático y enternecedor lo que menciona: “Vino es el nombre que elegí para bautizar al perro que rescaté de las calles mexicanas con el objetivo de integrarlo a mi familia y darle así la oportunidad de tener una vida digna llena de amor, bienestar, seguridad, cuidados veterinarios, diversión y una buena alimentación”.

Siempre tan solidaria…

Dentro de la mujer que derrocha sensualidad y disfruta las mieles del éxito cuidando su imagen como una auténtica diva hay un corazón noble y generoso que conoce la importancia de poner su fama y poder al servicio de causas benéficas. Ser madrina de la iniciativa “Write her future” impulsada por Lancôme y la organización “Plan International” para combatir el analfabetismo de las mujeres, haber apoyado económica y afectivamente a una niña india huérfana que conoció en Calcuta, a fin de darle la posibilidad de progresar en Madrid, posar para una campaña animalista de concientización para evitar el uso de pieles y comprometerse junto a su marido tanto con la ONG “Open Arms” que se dedica a rescatar a personas refugiadas que huyen a través del mar como con la asociación RED de lucha contra el sida, son parte de las numerosas buenas acciones que lleva realizadas.

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