El paso de los años no es suficiente para el avance de la historia: se necesitan ideas innovadoras que modifiquen la vida cotidiana para que se produzca el verdadero progreso. En el mundo de hoy, varios de los productos tecnológicos que se usan de manera diaria para satisfacer diversos deseos y necesidades nacieron del talento y la capacidad de los ingenieros y técnicos de Apple, una de las empresas más grandes del planeta. Por eso la figura de Steve Jobs, uno de sus fundadores, sigue tan vigente.
“La felicidad no la da el dinero ni el éxito, ni las cosas materiales,
solamente se encuentra en los afectos que te rodean”, manifestó Jobs.
La innovación es lo que distingue al líder de los seguidores, sostenía Steve Jobs. Desde que se unió a Steve Wozniak y Ron Wayne para la fundación de Apple en 1976 hasta su fallecimiento en 2011, esa fue la premisa que guió sus pasos. De la mente revolucionaria y la fortaleza de este empresario y talentoso diseñador industrial estadounidense, nacieron dispositivos y servicios novedosos que revolucionaron mundialmente las costumbres y llevaron a su compañía a la cima.
Su biografía, perpetuada con letras de molde, trasluce la fisonomía de su genio creador unida a su convicción y enorme capacidad de trabajo y esencia creativa: “Sus padres, dos estudiantes universitarios sin medios materiales para mantenerlo, entregaron al pequeño Steve en adopción al matrimonio formado por Paul y Clara Jobs, él era un maquinista ferroviario y ella ama de casa. Desde 1961, la familia Jobs residió en la pequeña ciudad californiana de Mountain View, importante centro de la industria electrónica estadounidense. No cabe duda que el ambiente local influyó en sus futuras inclinaciones profesionales; con apenas doce años se unió al Hewlett-Packard Explorer Club, asociación juvenil en la que los ingenieros de la compañía Hewlett-Packard enseñaban a niños y jóvenes las últimas creaciones en el terreno de la computación. Al terminar el bachiller en el Instituto Homestead de Mountain View, Steve Jobs ingresó en la Reed College, una universidad de artes liberales radicada en Portland (Oregón), pero abandonó los estudios universitarios un semestre más tarde. En esa época se interesó por la filosofía y la contracultura, llegando a viajar a la India en busca de iluminación espiritual. Tras unas prácticas en la empresa Hewlett-Packard en Palo Alto, en 1974 Steve fue contratado como diseñador por Atari, una compañía pionera de la naciente industria de los videojuegos”.
Así era su genio creador…
nace Apple
En aquella misma época se unió al que sería su primer socio, el ingeniero Stephen Wozniak, Jobs supo apreciar de inmediato el interés comercial del proyecto de microcomputador doméstico en que trabajaba su amigo; entre los bártulos y enseres domésticos del garaje crearon primero una imaginativa placa base y luego un computador completo, el Apple I, considerado el primer ordenador personal de la historia. En 1976, con el dinero obtenido en la venta de su furgoneta Volkswagen, fundaron la empresa Apple Computer, con sede en el garaje de la familia Jobs. Steve eligió el nombre Apple como un recuerdo de los tiempo en que le gustaban tanto las manzanas.
Todo comenzó con Apple I, una de las primeras computadoras personales en salir a la venta. Al brindar la posibilidad de combinar el microprocesador con un monitor y un teclado, consiguió despertar un gran interés, aunque se trataba de una máquina casi artesanal. Con Apple II, el éxito fue más notorio y sentó las bases para el crecimiento de la firma. El lanzamiento de la línea Macintosh, hoy conocida como Mac, llegó en 1983 y marcó la explosión de notoriedad de Apple. Pese a la popularidad de las PC con Windows, los expertos en tecnología suelen sentirse atraídos por las Mac. Apple fabrica tanto el hardware como el software de sus equipos, garantizando una óptima integración. La bella estética del diseño y la seguridad que ofrecen son otras razones que llevan a las Mac a contar con millones de fanáticos. Quienes buscan computadoras portátiles, en tanto, encuentran en las MacBook una solución ideal que brinda potencia y versatilidad.
La magia de las melodías…
Con creatividad, Apple cambió para siempre la industria de la música e incluso el hábito de dejarse atrapar por melodías. A comienzos de 2001 presentó iTunes, un reproductor multimedia y plataforma virtual que permite comprar, organizar y escuchar canciones. Meses más tarde, la empresa dio a conocer el famoso iPod, un emblema en lo referente al audio digital. De hecho, los podcasts tomaron su nombre de este aparato que marcó una era. Desde 2015, además, Apple Music ofrece música en streaming.
El iPad, un híbrido entre computadora portátil y teléfono; el iPhone, uno de los smartphones más vendidos; el reloj inteligente Apple Watch, y el asistente virtual Siri, basado en una avanzada inteligencia artificial, son otros aportes de Apple a la comunidad global. Aunque sus detractores critican su política ambiental, sus prácticas laborales y sus esfuerzos para impedir el crecimiento de sus competidores, la empresa sigue generando ganancias millonarias e incluso logró un récord de ingresos en el último trimestre fiscal.
Su enorme legado… y un consejo
a generaciones futuras
Luego de años de trayectoria y habiéndonos brindado una tecnología que nos cambió la vida y quizás un poco abatido por su enfermedad declaró: “Yo era practicante del budismo zen desde mi juventud, cuando viajé por primera vez a la India, creía que la mezcla de espiritualidad y alimentos sanos servía incluso como antídoto contra cualquier patología, sin embargo, me había negado a ser operado hasta que la enfermedad ya estaba demasiado avanzada, eso fue lo que impidió mi cura. Abrigo la esperanza que mi caso ayude a futuras generaciones a tomar conciencia y prevenir…”
«Estoy convencido de que aproximadamente la mitad de lo que separa a los empresarios de éxito de los que no lo son es pura perseverancia.»