Neuquén es una tierra nutrida de paisajes y escenarios naturales sublimes: ríos, lagos, montañas, valles, bosques y cerros hacen de la provincia un lugar excepcional. Cada destino ofrece alternativas seguras para disfrutar. La temporada primaveral - estival ofrece grandes opciones para los turistas que deseen visitar los destinos de la provincia del Neuquén. Todos los servicios y actividades turísticas habilitadas cuentan con protocolos de seguridad sanitaria aprobados para brindar una prestación segura, responsable y confiable.

Las temperaturas más agradables hacen que las actividades al aire libre se conviertan en aliadas de la temporada primavera - verano, teniendo en cuenta que se podrán realizar actividades como trekking; mountain bike; cabalgatas; kayak – canoa, excursiones lacustres, pesca deportiva, entre otras.

La ciudad de Neuquén ofrece un tipo de actividad turística basado en la paleontología, con varias excavaciones y museos. La enorme riqueza cultural neuquina se manifiesta en museos temáticos y yacimientos arqueológicos y paleontológicos distribuidos por toda la región. Se pueden visitar a pocos kilómetros de la capital neuquina, como en Villa El Chocón el museo municipal “E. Bachmann”, en Rincón de los Sauces se encuentra el museo “Argentino Urquiza” así como también el conocido como “Rinconsaurus”, que además cuenta con un parque temático que se puede recorrer mediante visitas guiadas, actividades y talleres de paleontología para grandes y niños. Estos sitios son un gran atractivo para los turistas, los amantes de la paleontología y los especialistas. También de paso hacia el centro de la provincia se encuentra en la entrada de la localidad de Plaza Huincul, el museo municipal “Carmen Funes” y en Zapala, el museo provincial de Ciencias Naturales, “Prof. Dr. Olsacher”.

El descanso en la ciudad capitalina, también es una excelente oportunidad para recorrer la reciente Ruta del Vino, que congrega distintas bodegas que abren sus puertas a los visitantes, entre las que se destacan: Malma, Familia Schroeder, Secretos Patagónicos, Patritti y Fin del Mundo, entre las localidades de San Patricio del Chañar y Añelo. Esta zona de estepa posee un clima y un suelo óptimo para el desarrollo vitivinícola, donde los viñedos propios se dedican a la elaboración de vinos finos y espumantes.

La capital también invita a los turistas a realizar paseos por la costa de los ríos Limay y Neuquén, como opción  para disfrutar de un día al aire libre en cercanías de la ciudad.

La extensa costanera que se extiende uniendo balnearios con el tramo conocido como “Paseo de la costa”, se convierte en un atractivo único para disfrutar de las sendas en bicicleta o caminando, haciendo paradas para contemplar el cauce del río, que se puede complementar con la oferta gastronómica en la zona de los Food Trucks.

Un destino encantador para visitar en la temporada primavera – verano es el Norte Neuquino. Este sitio místico y privilegiado, cuenta con altas montañas pintadas de blanco en sus cumbres. Ríos y vertientes de aguas claras le dan un tono especial a los pequeños valles, donde se asientan pobladores orgullosos de sus tradiciones y costumbres ancestrales. En Chos Malal y Andacollo, las poblaciones antiguas se dedican a la cría de chivos y ovejas; y aún guardan las tradiciones del Neuquén rural, como la trashumancia. Estas localidades son el paso para visitar otras como Las Ovejas, Huinganco y Varvarco, lugares que cuentan con Hosterías de la provincia y atractivos como cuevas de arte rupestre y fósiles, enmarcados en un paisaje natural que atesora atractivos que merecen visitarse. Varios de ellos dentro de Áreas Naturales Protegidas, otros en la inmensidad de sus caminos, en la travesía que depara la majestuosa cordillera del Viento. El Parque Provincial El Tromen, el volcán de 3.978 metros de altura con sus laderas de diversas tonalidades y ríos de lava solidificada; la reserva forestal A.N.P.P. Las Lagunas de Epulauquen, creada para preservar un reducto único de roble pellín; las Termas del Domuyo, un volcán que se encuentra a 4.709 metros sobre el nivel del mar, que desde sus profundas y escarpadas gargantas nacen arroyos de aguas calientes, fumarolas y olletas con propiedades termales.

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