Detrás de un mineral adorado en joyería por los trabajos extraordinarios que permite realizar se esconden historias, usos y creencias que contribuyen a la fascinación colectiva por los rubíes. Los accesorios que las damas de la realeza eligen para actos protocolares, eventos familiares y compromisos sociales en más de una ocasión le dan protagonismo al rubí, una de las piedras preciosas más maravillosas, y costosas, del planeta. Varias tiaras lucidas por la reina Máxima de Holanda y unos aros de la reina Letizia son apenas unas referencias de la presencia que tiene este material en las joyas de la corona.
